Los Servicios de Salud del Municipio de Zapopan (SSMZ) atendieron, durante 2016, más de mil 700 picaduras de alacrán a través de sus diferentes unidades de emergencia; Villa de Guadalupe y Santa Lucía, las zonas con mayor número de incidentes.
El jefe de Estadística y Epidemiología del Hospital General de Zapopan (HGZ), Jorge Mario Canela Gutiérrez, explicó que cerca de 80 por ciento de los piquetes del arácnido se registran dentro de las viviendas; en la mayoría de los casos, las víctimas son atacadas en extremidades –brazos y piernas– durante el reposo nocturno.
Canela Gutiérrez precisó que los síntomas por picadura de alacrán se agravan según la cantidad de veneno insertado y la dimensión del cuerpo del paciente, por lo que la población infantil es un grupo en situación de vulnerabilidad ante estos ataques.
Los síntomas por picadura de alacrán se clasifican en tres etapas; nivel 1: entumecimiento y comezón en el lugar de la herida y dolor de cabeza; nivel 2: salivación excesiva, sensación de cuerpo extraño en la garganta y dificultad para comer, y nivel 3: alteraciones en los ojos, dificultad para respirar, amoratamiento de labios, convulsiones y vómitos.
En caso de picadura, es necesario identificar la herida con calma, no agitarse físicamente, evitar ingerir líquidos o alimentos, y acudir de inmediato a una unidad de emergencia para erradicar el efecto de toxicidad mediante la aplicación de suero antialacrán o medicamentos sintomáticos.
El especialista explicó que los alacranes proliferan en primavera y verano debido a las altas temperaturas; su ingreso a las viviendas es a través de ventanas y puertas, suelen esconderse en muebles y ropa, y su movilización es por medio de paredes y techo.
Con base en ello, recomendó el uso de mosquiteros en ventanas y guardapolvos en puertas, pintar las paredes con colores claros para identificar la presencia de alacranes, cubrir las cunas y niños con sábanas para evitar que caigan sobre ellos y sean atacados, así como revisar las prendas y zapatos antes de usarlos.
Todas las unidades de Cruz Verde en el municipio y el Hospital General de Zapopan cuentan con suero antiarácnido y antialacrán, para la atención oportuna de personas que sufren ataques por animales ponzoñosos.